Bio
En mi cuerpo habitan dos almas que separar quisiera: la una, apegada a la vida, se acoge a este mundo que no quiere soltar; la otra, huyendo de la noche que la rodea, se abre camino a través de los espacios donde habitan nuestros antepasados”
Fausto. Goethe.
En mi cuerpo habitan dos almas que separar quisiera: la una, apegada a la vida, se acoge a este mundo que no quiere soltar; la otra, huyendo de la noche que la rodea, se abre camino a través de los espacios donde habitan nuestros antepasados”
“En mi cuerpo habitan dos almas que separar quisiera: la una, apegada a la vida, se acoge a este mundo que no quiere soltar; la otra, huyendo de la noche que la rodea, se abre camino a través de los espacios donde habitan nuestros antepasados”
Fausto. Goethe.
El cuerpo de este actor nació en 1979 en España y recibió el nombre de Rodolfo. Este nombre es de origen germano que viene del nombre compuesto “Rhod-Wulf” o “Hrod-Wulf” y significa “aquel que gana la batalla”, “el que busca la gloria” o “consejero de lobos”. Wulf significa simplemente lobo solitario.
A los 11 años este cuerpo descubrió el teatro: el teatro más artesanal, el trabajo creativo en equipo, los primeros textos dramáticos, las compañías por amor al arte. Descubrió esa otra vida sobre un escenario, ese desdoblamiento y dualidad. La realidad y la ficción. Durante esos años, a este cuerpo todo ese trabajo le abrió el alma y la mente.
Desde entonces siempre le han excitado los lugares desconocidos, esos personajes que defendían sentimientos y principios que no conocía, que en su entorno más cercano no se hablaban o en esa época ya no existían. Aprendió a defender conceptos como el honor, lo prohibido, la traición, la poética e indagar sobre la pasión, las consecuencias de la ira… Esos espacios liminales de transición – desconocidos sin ninguna duda.
Este cuerpo entiende que en los nuevos caminos que llevan a lugares desconocidos, la victoria está asegurada porque el aprendizaje supera los niveles de control. Ese desconocimiento es suculento. Trabajar en equipo, con desconocidos… Son una de los regalos de esta profesión.
bio 2
Su primera formación en el Laboratorio de Teatro William Layton en Madrid, le aportó el amor y el rigor de las palabras y las emociones. En esos años tuvo la fortuna de formarse con Arnold Taraborrelli en cuerpo y con Antonio Llopis descubrió el contacto con la propia intuición del actor sobre en un escenario, en una improvisación, a estar frente a otro intérprete en la más absoluta de las incertidumbres: la verdad escénica.