Caballitos de Anís existe por sus dos personajes, que podrían ser intérpretes, dos personajes salidos de una obra de teatro, trabajadores de una fábrica, artistas de circo. Dos individuos que se encuentran dentro de la pieza, hablando de pieza como mundo que les ha tocado vivir. Oirán las declaraciones de una voz en off como estado y poder. Más tarde, una música suena y, finalmente, el silencio. Elementos que estos personajes intentarán encajar, de la mejor manera posible, el absurdo cotidiano.
«Mención especial del jurado a la coreografía e intérpretes»