CINE

Al llegar hasta aquí has aceptado el trato, que los “no creyentes” no se atrevieron a tomar: el deseo de ver (videre – vista – vis a vis – voyeur). Has abierto la puerta y desde donde te encuentras ahora -exactamente en este punto- está en tu poder formarte una imagen de mí basada en lo que ves o crees ver de mi. 

El cine, delante y detrás de la cámara, es un acto de creación, de creencia y de observación. Es un acto de fe y, a la vez, una metodología misteriosa, única y personal. El gran Jarmusch dice que no hay reglas; hay tantas como directores. Te sorprendería descubrir cuánto se oculta delante de la cámara: más de lo que se muestran. De esta misma forma que a través de la mentira, creamos la verdad: la ficción, y la realidad.